Pruebas por el camino

19.11.2012, 16:33

En la etapa final del tratamiento, los cuatro participantes fueron a la alza de seis días a la cima de la montaña sagrada Tashtar Ata. Detrás cada uno llevó mochila con  una "piedra de alma".

El punto de partida fue el nek de Ala-Bel. A una altitud de 3 mil metros el paisaje de montaña fascinado con la variedad,recibió a los participantes con los cambios de temperatura. El frio tremendo de madrugada de pronto dio paso a un día soleado. El viento secaba sin piedad la cara y las manos.

Desde el principio quedó claro que el camino a ser difícil, pero no sólo por el mal tiempo o condiciones de campo. Abordar la distancia de 250 kilómetros es muy duro y mentalmente. Es inevitable un flujo interminable de pensamientos y los cambios debilitantes y frecuentes de humor durante la caminata. Por lo tanto, todo el camino los peregrinos estan acompañados por entrenador y psicoterapeuta.

Los dos primeros días fueron relativamente fáciles para los peregrinos. Gleb en el primer día sentió el dolor en la espalda, le resultó muy difícil caminar. Y él estaba listo para volver a la clínica. Pero después de inyección de analgésicos, continuó su camino.

Los líderes eran Anatoly y Andrei. Ellos mísmos desde el principio  eligierón la peregrinación como la última etapa de tratamiento. Los médicos también estuvierón de acuerdo con su opinión. A pesar de las ampollas que aparecieron en el segundo día, y el dolor en las piernas, no se rindierón. Recordamos que los participantes tenían que ir por un camino recto. Esa es la regla violada por Gleb. A lo mejor, con ganas de llegar rápidamente a Anatoli y Andri, para eso decidió cortar el camino. Aunque la alternativa no resulto ser muy buena.

Trepando por las rocas, puso al peligro a él mismo y al operador que le persiguia pisándole los talones. Y después de que el chico rompió su piedra, lo echsrón sin previo aviso y el derecho a una buena palabra.

Lo más interesante es que Gleb preveía ese resultado. Después de la decisión de los médicos que le enviara a una peregrinación en lugar de la terapia del estres energetico, que eligió como tercera etapa de tratamiento, compartió:

"Creo que sería mejor que me fui a un shock, ya sé lo que pasará después de 250 kilómetros. Voy a ir, voy a estar enojado con esa piedra. Simplemente será enojo. Pues no quiero ir más allá, pero voy igual. Podría en América ir 250 kilometros con una piedra en mi mochila, si fuera realmente necesario. Para mí sería como un viaje. Acabaré de venir enfadado, tiraré  la piedra y no pasrá nada más. Pasé 380 kilometros, yo sé lo que es. También con una mochila",- se indignó él.

"Yo quería seguir adelante!", - dirá él más tarde. Pero la decisión de los médicos de enviarlo a casa era inquebrantable.

Tras Gleb Irina voluntariamente deja su camino de rescate. Según ella, no tenía ninguna fuerza más moral o físico para seguir adelante.

"Yo ya pedía la baja médica, porque sé que no puedo aguantar esta peregrinación. No van los pies, todo duele. Los callos, cojeando todo el día de ayer. Muy Difícil. Además no veo sentido. ¿Para qué sufrir? Los dos primeros días caminé muy relajada. Al tercer día la piedra se convirtió en insoportable. Y no se puede descansar. Te sientas, y levantarte otra vez no puedes ya",- dijo ella, volviendo a la clínica.

Irina está segura que esto es el final de su tratamiento. Ella superó justo lo que necesita. Ya se acabó todo.

Al mísmo tiempo, a pesar del cansansio enorme, otra vez vendando las heridas, Anatoli y Andrei heroicamente siguien su camino. Resultó que, no es tan fácil. Y sólamente ellos tienen una oportunidad de "deshacerse y encontrar" finalmente.

  •  Publicar en Facebook
  • Publicar en Twitter
  •  Publicar en LiveInternet
  •  Publicar en LiveInternet

Crónica completa

Comentarios:

  • Bernard   21.11.2012, 16:23
    No dudo de la importancia de discutir el tema. El mismo debe analizarse con seriedad y profundidad, sin argumentos falaces como premisas. Lo primero debería ser hablar de la adicción química y la naturaleza biológica del ser humano, lo cual trasvasa culturas y diferencias étnicas, raciales, económicas, sociales o políticas. Así, podremos entender mejor el porqué se deben enfrentar tanto la oferta como la demanda. Las herramientas fundamentales de esta lucha deben ser la información y la educación. La estrategia de esta lucha debe basarse más en la razón y menos en la conveniencia. La política de los Estados debe garantizar el derecho a la salud de su población.

Deja un comentario:

El contenido de este campo se mantiene como privado y no se mostrará públicamente